"Encontrarás un hombre con el que hablar, Connie" El Amante de Lady Chatterley
El último libro que he leído es el clásico de D.H. Lawrence (uno de los mejores escritores en lengua inglesa del siglo XX) El Amante de Lady Chatterley que como es bien sabido estuvo prohibido durante décadas en Reino Unido hasta que los abogados de los descendientes de la mujer de D.H. Lawrence (que tenía 3 hijos de una relación anterior) consiguieron lo impensable y ganaron un juicio al estado británico.
De hecho, El Amante de Lady Chatterley se convirtió en un libro célebre y ahora es todo un clásico inmortal de la literatura universal gracias a esta sentencia judicial y sobre todo desde que se permitió su reproducción.
El Amante de Lady Chatterley
Tanto es así, que los argumentos que esgrimieron los abogados de la defensa contra el Home Office británico se estudian en universidades del mundo anglosajón debido a la altura de los mismos que de hecho consiguieron derrotar al estado británico por lo que se reaudunó la venta del libro El Amante de Lady Chatterley
La verdad es que he disfrutado enormemente de su lectura. Por ejemplo, me ha gustado mucho el personaje de Connie. Una mujer sin complejos y natural que está adelantada a su época.
Tanto es así, que me parecía un personaje literario escrito en el Siglo XXI. Por eso me resultaba del mismo modo extraño que este libro se hubiera censurado en su época pero claro, en el Siglo XXI ver series sin ir más lejos, de capital procedente de la televisión privada americana (HBO por ejemplo) hace que lo raro sea que no haya ninguna escena de erotismo.
Por contra, en la época en que D.H Lawrence escribió este libro no es que escribir o mejor dicho describir escenas con un lenguaje tan rico en lo que al erotismo concierne fuera extraño, es que el personaje de Connie es tan rico que dudo seriamente de que Madame Bovary (el libro más importante del escritor francés Flaubert) este archiconocido personaje sea tan grande. De hecho, Constance Chatterley es también un personaje memorable.
El problema radica en que D.H. Lawrence era un escritor polémico y por cierto mejor que Virginia Woolf al que el feminismo del Siglo XX ha elevado y con razón pero desde el punto de vista de la calidad literaria, D.H. Lawrence es mejor pero el problema que tuvo este escritor inglés es que mantuvo una relación de amor odio con el Imperio Británico y en especial Inglaterra que le persiguió toda la vida.
De hecho, pese a lo famoso que fue en vida y la calidad de sus obras (también escribió poesía, cuentos u obras teatrales) los periódicos le atacaron el día de su sepelio y en su momento animaban a los ciudadanos británicos a comprar El Amante de Lady Chatterley pero solamente para quemarlo.
D. H. Lawrence no se andaba a la zaga y por ejemplo rechabaza ir a Inglaterra a presentar sus obras o pinturas (iba su mujer en su lugar) y vivía exiliado sobre todo en Italia o México, países que prefería ya que siempre expresaba:
El mero hecho de pensar en Inglaterra me repugna y estar allí incluso más
Lo irónico de todo es que la prohibición de El Amante de Lady Chatterley hizo que ahora este libro tan polémico durante su vida haya alcanzado este estatus tras su fallecimiento.
¿Has leído El Amante de Lady Chatterley?
Comenta, comparte.